Sunday, October 11, 2009

CLAUDIO CORREIA CAMPEON EN EL TORNEO OLIMPICO DE LA JUVENTUD DE PORTUGAL.-


El pasado 10 de octubre de 2.009, Claudio Correia deportista del Centro de Tecnificación Príncipes de Tadmur, se desplazó a la localidad de Salvaterra de Magos tras una llamada urgente de la Federación Portuguesa de TAekwondo para disputar el Torneo Olímpico de la Juventud clasificatorio para participar en el Preolímpico de Mexico que se celebrara en Tijuana (México) para la clasificación de las I Olimpiadas de la Juventud que organiza el COI (Comite olímpico internacional).

Todos los atletas nacidos en el año 1.993 y 1.994 participaron, Claudio compitió en la Categoría de - 55 kg siendo el vencedor en todos sus combates, proclamandose campeon.

Ahora Claudio tendrá su segundo enfrentamiento en el Campeonato Nacional Junior de Portugal que se celebrara el próximo 11 y 12 de diciembre, donde ira acompañado de su entrenador Jesús Ramal.

Tuesday, September 29, 2009

Suvi en MasTaekwondo.-


Suvi Mikkonen, tiene un futuro muy prometedor, que sumado a su constancia y esfuerzo continuo en los entrenamientos, demuestra que Suvi quiere hacerse un lugar entre la élite de nuestro deporte.

Dellincuencia y Deporte.-

Voy a tratar un tema muy importante a mi modo de ver... es sobre la delincuencia, la juventud, y la influencia del deporte en alejar a la juventud de las nefastas consecuencias de este azote de la humanidad.

Sé que es un tema muy debatido, muy delicado y que muchos no quieren afrontar, especialmente los que directamente tienen que ver con este tema: los padres de familia, los educadores y las autoridades.

Tenemos que tener una visión clara del asunto para desechar mitos que nos causen confusión.

La delincuencia abarca muchos campos entrelazados entre sí: vagancia, pandillas, licor, drogas... e inevitablemente nos lleva a un solo fin, la destrucción del individuo, lo que lleva a la destrucción de la familia que es núcleo fundamental de la sociedad y a la destrucción de la propia sociedad en sus valores...

La delincuencia es un problema social muy complicado y tiene muchas causas, entre algunas es el resultado de: inteligencia pobre debido a la mala alimentación en las clases populares por una condición socioeconómica baja, el ambiente de los padres en el hogar, malas compañías, falta de sitios adecuados de juego y de recreo, pocas facilidades recreativas y culturales, la propaganda comercial mal dirigida, la ignorancia o falta de información correcta sobre la función de un individuo dentro de una sociedad, el sensacionalismo de las noticias sobre los actos delictivos criminales y la glorificación de los marginales de la Ley, la falta de instrucción ética y religiosa, la explotación de menores, la pornografía, las drogas, los miedos, las tensiones, ansiedades e incertidumbre, que son producto del actual mundo globalizado.

Muchos pensamos que la delincuencia disminuirá con más educación, con más espíritu deportivo, con una mejor organización y educación del núcleo familiar, con una mejor información de la prensa, con más puestos de trabajo, con mas producción, con mejor calidad de la enseñanza, que en los colegios y universidades no solo se dediquen a la parte técnica sino a enseñar moral, ética y valores como en antaño.

Y para lograr esto necesitamos tomar una actitud positiva ante la vida.

Para los gobernantes que tienen el poder, educar a una nueva generación de ciudadanos, transmitiéndole valores a través del Deporte. Para ello establecer centros de enseñanza deportiva satélites en puntos estratégicos en beneficio de todos los sectores sociales.

Para los padres, tener un mayor control de sus hijos, de sus amistades y en que emplean su tiempo libre, estar con ellos, ser amigos de ellos.

Para los profesores, que se dediquen a eso, a enseñar, no solo su materia, sino cómo comportarse correctamente en la vida.

Para los entrenadores deportivos, enseñarles la mística del mismo, no solo las reglas y jugadas, sino también la disciplina y el coraje, el saber ganar y perder deportivamente, el deseo del triunfo por medios lícitos.

¿Y por qué el deporte?... porque considero que es una de las mejores armas que tiene la sociedad para alejar a la juventud de la droga y la delincuencia, tenemos muchísimos ejemplos en todos los deportes de estrellas que salieron de barrios o sitios muy pobres, donde estaban listos para enrolarse en las filas del vicio y la vagancia precursoras de males mayores.
El Tae Kwon Do, es uno de ellos, enseña disciplina, educación Marcial, nuestro jóvenes deportistas bonarios, entrenan cada día, a continuación mostramos una clase de los LITTLE SENSEI, nuestros jóvenes bonarios, en sus entrenamientos marciales.

Luis García
Caballero de Justicia

En la Escuela Internacional HANKUK + ORDEN BONARIA.-

El Duque de Berat, primogénito de la Casa de Tadmur, entrenando al igual que sus compañeros, en este momento en clase con la campeona Suvi Mikkonen.

Aimor, en un momento del combate.-



Amistad, deporte, forman parte de la cultura y la educación marcial.-


Y el juego, y compañerismo...

Tuesday, September 22, 2009

SIMON INDIAS.-


ORO INTERNACIONAL KRASNOYARSK (SIBERIA) 2.008

PLATA CAMPEONATO ESPAÑA JUNIOR 2.009

BRONCE CAMPEONATO ESPAÑA SUB – 21 2.008

ORO CAMPEONATO MADRID SUB – 21 2.009

ORO CAMPEONATO MADRID JUNIOR 2.009

PLATA CAMPEONATO MADRID SENIOR 2.009

BRONCE CAMPEONATO MADRID SUB –21 2.008

BRONCE OPEN ESPAÑA CLASS – A 2.009

PARTICIPACIÓN CAMPEONATO EUROPA JUNIOR 2.009

SARA ESPEJEL.-


ORO SALVATERRA DE MAGOS – PORTUGAL 2.008

ORO DRACULA OPEN – RUMANIA 2.008

BRONCE CAMPEONATO ESPAÑA JUNIOR 2.009

PLATA CAMPEONATO MADRID SENIOR 2.009

PLATA CAMPEONATO MADRID SUB – 21 2.008

ORO CAMPEONATO MADRID SUB – 21 2.009

PLATA CAMPEONATO MADRID JUNIOR 2.009

AMANDA REIMERS.-


ORO BELGIUM OPEN CLASS – A 2.009

PLATA BRITISH OPEN CLASS – A 2.009

PLATA DRACULA OPEN – RUMANIA 2.008

PLATA CAMPEONATO ESPAÑA JUNIOR 2.009

BRONCE CAMPEONATO ESPAÑA SENIOR 2.009

ORO CAMPEONATO MADRID SENIOR 2.009

ORO CAMPEONATO MADRID SUB – 21 2.008

ORO CAMPEONATO MADRID SUB – 21 2.009

ORO CAMPEONATO MADRID JUNIOR 2.009

Sunday, September 20, 2009

Prior General de Asuntos Deportivos.-


Jesús Ramal


Prior General de Asuntos Deportivos de la Orden Bonaria.

Técnico Especialista de Taekwondo por el Comité Olímpico de Finlandia en el Proyecto Olímpico Londres 2.012

Coach Oficial para los eventos WTF y ETU por la Federación Finlandesa de Taekwondo.

Coach Campeonatos de España 2.008 – 2.009 con la Federación Madrileña de Taekwondo (Cadete, Junior, Sub – 21 y Senior)

Coach Copa del Rey con la Federación Madrileña de Taekwondo

Coach Open Alemania con la Federación Española de Taekwondo.

Coach Internacional, – Bonaria Team 2.008 – 2.009 en; Andorra, Finlandia, Siberia (Rusia), Portugal, Rumania, Suecia, Bélgica, Serbia e Inglaterra.

Centro de Estudios de Disciplinas Tradicionales de la República de Chile.-

Hermanamiento entre la Academia Concordia de las Ciencias y las Artes y el Centro de Estudios de Disciplinas Tradicionales de la República de Chile

La Academia Concordia de las Ciencias y las Artes se complace en anunciar un nuevo hermanamiento, esta vez, en las regiones australes americanas, en la mágica Cordillera de los Andes, la República de Chile guardiana de sus cumbres posee un centro de estudios que se dedica fuertemente a difundir la magia del continente y su lazo dorado con la Europa eterna. Es el Centro de Estudios de Disciplinas Tradicionales (C.E.D.T.), presidido por el Dr. Sergio Fritz Roa, un joven exponente del tradicionalismo en Chile y de los mas importantes de Sudamérica.

Quién les escribe, no sólo reconoce su largo y fructífero transitar académico, sino también el humano y espiritual de este gran investigador, escritor y conferencista. Para nuestra Academia, es un verdadero prestigio contarlo entre nosotros.

A continuación, una breve biografía de Sergio Fritz Roa y de los objetivos del Centro de Estudios de Disciplinas Tradicionales (C.E.D.T.)

Sergio Fritz Roa: Nacido en Santiago de Chile el 21 de enero de 1975, es abogado, escritor, investigador, conferenciante y amante del arte fantástico, estudioso de la metafísica tradicional y el simbolismo hermético.

Dirige la revista virtual "Bajo los Hielos. Tradición y Poesía Trascendente" (www.bajoloshielos.cl) que en el año 2009 cumplió 10 años de su existencia. Autor de la novela «El Jardín de Trincheras», coautor de la enciclopédica obra "Codex Templi" (Aguilar, Madrid, 2005), "Templarios: Cruz y medialuna" y del libro "Poliedro I" (Primeras ediciones, Rancagua, 2006), como de varios artículos sobre espiritualidad tradicional y Literatura Fantástica. Ha publicado en distintas revistas europeas y americanas [«L’Idea. Il Giornale di Pensiero» (Italia); «Lhork», (España); «Ciudad de los Césares» (Chile), «Casa del Tiempo» (México); «Serpiente Emplumada» (Perú); entre otras]. Junto a su obra narrativa y ensayística es autor de una obra pictórica y virtual inspirada en Virgil Finlay, Albrecht Durer y Clark Ashton Smith.

Fue invitado en dos oportunidades a la “Semana Guenoniana de Buenos Aires” celebrado en la Biblioteca del Congreso de la Nación Argentina, en el año 2004 y 2007.

Centro de Estudios de Disciplinas Tradicionales: Fue creado con la intención de promover el estudio de las ideas tradicionales como su aspecto práctico. Constituido por un grupo de diversos autores, de las más variadas nacionalidades, se desea llevar al terreno práctico las profundas verdades de la Sophia Perennis no sólo en ambientes académicos o eruditos, sino en todo terreno donde existan mujeres y hombres que deseen oír y ver.

De esta forma, y sólo por vía ejemplar, podemos señalar que en el C.E.D.T. se estudiará seriamente asuntos como la relación macro - microcosmos, la alimentación orgánica, la música y el arte tradicional en general como sus beneficios; las distintas ciencias cosmológicas (Astrología, Alquimia, etc.); y las aplicaciones médicas tradicionales (Espagiria, Reflexoterapia, la medicina paracélsica, etc.).
Entre los objetivos principales del C.E.D.T., podemos destacar:
* Formación de una elite que pueda ser portadora de la sapiencia tradicional.
* Fomento del pensar tradicional en todos los ámbitos.
* Defensa de las distintas formas religiosas tradicionales (Catolicismo, Ortodoxia, Islam, Judaísmo, Hinduismo, Zoroastrismo, Budhismo, espiritualidades americanas, etc.) como de otras manifestaciones de esoterismo (Templarismo, Kabbalah, Alquimia, Rosacrucismo, Masonería, etc.).
* Generar un diálogo fraterno y sincero entre las anteriores formas espirituales.
* Criticar los aspectos peligrosos de la modernidad, en tanto ideología y praxis.
* Estudiar la sabiduría primigenia de las distintas culturas, incentivando el respeto por su forma de ser.
* Aplicar los principios tradicionales en todos los aspectos posibles: medicina, política, arte, alimentación, economía, etc.
* Estudiar las ciencias cosmológicas.
* Dictar charlas sobre Tradición y sus aplicaciones, como acerca de René Guénon y demás autores tradicionales.
* Realizar cursos sobre disciplinas tradicionales.
Las actividades del C.E.D.T. serán difundidas en este espacio como en el Boletín Bajo los Hielos, al cual puedes suscribirte gratuita y directamente yendo a :
http://www.egrupos.net/grupo/bajoloshielos

La ACADEMIA CONCORDIA DE LAS ARTES Y LAS CIENCIAS, da su calurosa bienvenida al CENTRO DE ESTUDIOS DE DISCIPLINAS TRADICIONALES, y promete para los lectores difundir sus actividades, cursos, publicaciones y otras noticias relevantes para vuestro conocimiento.

++Mons. Teofano O.S.
Gran Canciller ORDEN BONARIA


Monday, September 14, 2009

La Cruz de las Beatitudes, es de Oriente.-


Hace 4000 años, el mar Egeo entre Grecia y Turquia y la isla de Creta, fue la cuna de nuestra civilizacion occidental, que , segun los etnologos, comenzo con las civilizaciones cretense y micenica. Esto lo sabe todo el mundo. Lo que no saber bien es que 5000 años antes habia alli ya hombres civilizados, que vivian en poblaciones pequeñas como Hacilar y Catal Huyuk, al sur de Anatolia o Dorak, en el norte, cerca dellugar en que Troya fue construida mas tarde. Sus herramientas, sus armas, sus espajos, estaban hechos de obsidiana, una especie de cristal volcanico negro, que encontraban en las vecinas montañas. Cultivaban los cereales y tenian rebaños 9000 años atras. ¿Como pudieron convertirse en seres civilizados tan de repente? Tal vez un dia podamos explicar eso gracias al descubrimiento de un hecho mucho mas sorprendente todavia, a saber: que esos hombres eran poseedores de conocimientos avanzados en materia de Astronomia y de Matematica.

En el centro del Mar Egeo, existe una pequeña isla llamada Delos que fue siempre el sitio mas sagrado del mundo griego de la antiguedad, sin que se sepa exactamente por que. Yo he descubierto que se tratab a, simplemente, de una cuestion de geometria. Si nosotros tomamos una carta del Egeo, y colocamos una de las puntas del compas en el centro de la isla y trazamos un circulo de 270 kilometros, o sea 1500 estadios egipcios amtiguos de 180 m de radio, pasamos sucesivamente por el cabo Matapau y Delfos en Grecia, la isla de Psathura, Akra y Araden en la isla de Creta, kamiros en la isla de Rodas.
Siempre con Delos como centro, tracemos ahora un circulo mas pequeño de 180 km de radio, o sea 1000 estadios egipcios. Pasamos ahora sucesivamente por Hermione, un lugar donde el agua poco profunda entre las islas de Skyros y de Lesbos, Didymes en Anatolia, y un punto actualmente sumergido al norte de la isla de Dia. Contando Delos tenemos ahora trece lugares geograficos, un numero que simpre ha sido considerado magico. Todos los puntos situados entierra firme, y probablemente tambien aquellos que ahora se encuentra bajo el agua, eran sitios sagrados para los griegos desde los tiempos mas antiguos. Alli construyeron ellos sus templos mas celebres, sobre las ruinas de loslevantados por sus antecesores millares de años atras, sin saber exactamente por que esos lugares eran considerados sagrados.
Sin embargo, estos puntos no habian sido escogidos aql azar. Hemos de recordar en primer termino que hace aproximadamente 3500 años, probablemente en el 1521 a. de J.C. el sur del Egeo y la isla de Creta se vieron afectados por un cataclismo espantoso provocado por la erupcion del volcan de la isla de Santorin (que se llamaba Thera entonces), que dio lugar a una serie de temblores de tierra y de marejadas altas, con el hundimiento del fondo marino y de numerosas islas, particularmente entre Santorin y Creta. Se considera este cataclismo como la causa de la desaparicion repentina de la civilizacion cretense y dela conquistade las islas del mar Egeo por los micenicos. Por lo que a nosotros concierne, es cierto que los puntos citados antes, que estan sumergidos, eran islas antes de la catastrofe, en la epoca por la que nos interesamos, es decir, hace mas de 5000 años, y quizas algunos años mas.
Volvamos ahora a nuestro dos circulos y a nuestros trece puntos, y tracemos una linea continua que pase por estos ultimos, en el siguiente orden: Delos-Matapán-Hermione-Psathura-Lesbos-Antandros-Delos-Sardes-Didymes-Kamiros-Delos-Akra-Araden y Delos. Hemos trazado asi un magnifico dibujo geometrico. La cruz de Malta que ha sido siempre un simbolo sagrado desde la mas remota antiguedad pagana y que por una razon misteriosa habia sido adoptaa por los cruzados que se proponian liberar a Jerusalen de los infieles. Como dijo alguien, los designios de Dios son impenetrables.
No es esto lo que nos interesa, sino saber como y orque llego alli esta CRUZ BONARIAtan perfecta, de mas de 500 km. a traves del mar Egeo, pasando sucesivamente por la tierra firme, el mar, las islas y las montañas. Hay que tener en cuenta que desde el suelo no es visible. Solo se puede ver desde el aire y a cierta altura. En la latitud de Delos, 37 grados, 23 minutos, la tierra gira a una velocidad de 1328 km/h. Por consiguiente, seria necesaria una cabina espacial que desarrollase tal velocidad en el suelo nula, para permanecer en vuelo estacionario por encima de la isla de Delos, centro de los dos circulos.

Seria preciso a continuacion que esta cabina se hallara equipada con un radar de navegacion y de velocidad en el suelo, , que acaba de ser puesto a punto, para permanecer muy exactamente por encima del centro de los dos circulos. Haria falta luego un radar clasico de media distancia, del que se dispone desde hace unos treinta años, con reflectores o respondedores apropiados, para medir con exactitud los 180 olos270 km necesarios.

No se trata de un esquema de ciencia ficcion. o bien la Cruz de Malta ha sido trazada de esta manera o fue dibujada con medios mas perfeccionistas que aun desconocemos. Esta cruz de Malta nexiste. Desde luevo, no puede ser mostada a los turistas, pero cuando se examina una carta del Egeo se torna visible. Y los griegos antiguos no la conocian, como no conocian la astronomia ni la geometria antes de ir a aprender ambas ciencias a Egipto. Asi, pues, fue trazada mucho tiempo antes de su aparicion, millares de años atras, quiza. Lo sorprendente es que no haya sido localizada antes En cuanto a averiguar quien la dibujo y con que objeto es ya otra cuestion que estudiaremos mas adelante.

Sin hablar de las figuras geometricas de Nazca, que tantos comentarios han suscitado, por cuya razon apenas aludo a ellas aqui se encuentran en distintas partes del mundo otros dibujos geometricos gigantescos que pueden verse desde el cielo, siendo descubiertos unicamente desde el aire. Los hay que solo pueden ser apreciados examinando una carta marina, como la CRUZ DE MALTA, del mar Egeo. Todas estas figuras tienen una caracteristica comun. Estas medidas en estadios de 600 pies, es decir, el estadio maya o egipcio de 180 m, o bien el de Tiahuanaco de 178,34 o el cuenca de 280,566. Estos estadios asi como los pies y los codos que derivan, parecen haber sido las mas antiguas medidas de longitud utilizadas desde que el hombre existe.

Sunday, September 13, 2009

Simbolismo en la Cúpula Bizantina.-




Según René Guénon, toda construcción religiosa posee una significación cósmica. Este principio es aplicable a la arquitectura cristiana, en general, y bizantina en particular. En este ensayo, precisamente, intentaremos ingresar al simbolismo cosmológico de un tipo de arquitectura específico: el edificio cupulado. La cúpula, como podremos constatar, no es un elemento arquitectónico meramente decorativo, sino que responde a concepciones estéticas fundamentadas en un simbolismo preciso. La cúpula no tiene sentido en sí misma, sino en cuanto a lo que representa: la bóveda celeste.

Asimismo, tampoco se la puede aislar para estudiarla, sino que se la debe considerar en directa relación al resto del edificio, con el fin de aprehender el simbolismo cosmológico en toda su extensión: la cúpula representa al cielo y, su base, la tierra; así, el edificio completo es una imagen del cosmos.

La vía que utilizaremos para ingresar al simbolismo de la arquitectura cupulada bizantina será el análisis del llamado Himno siríaco de la catedral de Edessa, que data de mediados del siglo VI d.C., o principios de la centuria siguiente. Nuestro estudio consta de tres partes esenciales: en la primera se presentará la fuente en forma íntegra, para después tratar de definir la forma que pudo tener el edificio, destruido en el siglo XI. Enseguida, en una segunda parte, deberemos hacer un breve paréntesis explicativo sobre las características de la arquitectura bizantina, lo que nos permitirá, por un lado, obtener una visión más clara del tipo arquitectónico de la catedral de Edessa y, por otro, nos proporcionará el cuadro adecuado para entrar de lleno en la tercera parte de este artículo, que se refiere al simbolismo cosmológico propiamente tal del templo, y contenido en el Himno.

* * *

Uno de los documentos más importantes para ingresar al análisis simbólico-cosmológico de la arquitectura bizantina del siglo VI, lo constituye el Himno de la Catedral de Edessa. Éste, fue probablemente escrito para la ocasión de la dedicación del templo, después de su reconstrucción, hacia los años 543-544[1]. El primitivo edificio, consagrado entre los años 345-346, fue destruido por una inundación[2]. Este texto, escrito en siríaco, pero griego en espíritu, es el más temprano documento que asocia la cúpula central de una iglesia cristiana con una simbología teológica y mística; así, pues, el Himno provee la primera evidencia de la popularización de la noción de "bóveda de los cielos" entre los cristianos del siglo VI[3]. A continuación transcribiremos el Himno completo, para después detenernos en el simbolismo de la cúpula, estableciendo algunas relaciones con otros escritos bizantinos de la época.

HIMNO SIRÍACO DE LA CATEDRAL DE EDESSA[4]

1. ¡Oh, Tú, la Esencia que resides en el Templo Santo, cuya gloria emana naturalmente de Ti!

¡Dame la gracia del Espíritu Santo para hablar del Templo de Edessa!


2. Bezaleel fue quien, instruido por Moisés, erigió el Tabernáculo para que sirviera de modelo.

Son Amidonius y Asaph y Addai quienes construyeron para Ti en Edessa el templo glorioso.



3. En verdad, en él han representado los misterios de tu Esencia y de tu Plan (de Salvación).

Y el que lo observa minuciosamente se llena de admiración al verlo.



4. En efecto, es algo realmente admirable que en su pequeñez sea tan parecido al vasto mundo.

No por las dimensiones, sino por el tipo: está rodeado por las aguas, igual que el Mar (rodea al mundo).


5. Su techo está extendido completamente, semejante al cielo, sin columnas, abovedado y simple.

Además está adornado con mosaicos de oro, así como el firmamento lo está por estrellas brillantes.



6. Su elevada cúpula es comparable al cielo de los cielos.

Es como un casco, y su parte superior reposa sólidamente en la inferior.



7. Sus arcos, anchos y espléndidos, representan las cuatro partes del mundo.

Por otra parte, debido a la variedad de los colores, reúnen en sí al arco glorioso de las nubes.



8. Otros arcos lo rodean, como si fueran salientes rocosos que coronan la cima de una montaña.

Es sobre ellos, y en ellos y por ellos que la cubierta entera junta con los arcos.



9. Sus mármoles se parecen a la Imagen no hecha por mano de hombre, y sus muros están armoniosamente revestidos de mármol.

Debido a su blancura y pulido son tan esplendorosos que absorben en sí la luz, como el sol.



10. Se ha puesto plomo sobre la cubierta, para que no fuera dañada por las lluvias.

No se ha utilizado en absoluto madera en su cubierta, y aunque parece fundida (de metal) es toda de piedra.



11. Está rodeada de magníficos patios, con dos pórticos de columnas.

Representan las tribus de Israel que rodeaban el Tabernáculo de la Alianza.



12. A cada lado posee una fachada idéntica, pues el tipo es el mismo en las tres.

Del mismo modo que una es la forma de la Santísima Trinidad.


13. Además, brilla en el coro una única luz, por las tres ventanas que allí se abren.

Anunciándonos el misterio de la Trinidad del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.



14. Además, la luz de los tres lados entra por ventanas numerosas.

Representan los Apóstoles y Nuestro Señor y los profetas y los mártires y los confesores.



15. En el centro se ha colocado un podio, a modo del Cenáculo de Sión.

Y debajo de él hay once columnas, como los once apóstoles que allí se habían reunido.



16. La columna situada detrás del podio representa, por su forma, el Gólgota.

Encima de ella se ha fijado una cruz luminosa, como Nuestro Señor entre los ladrones.


17. Más aún, se abren a ella cinco puertas, a la manera de las cinco vírgenes.

Y a través de éstas entran los fieles con gloria, como las vírgenes al lecho nupcial de Luz.


18. Las diez columnas que sostienen el Querubín de su coro representan

los diez apóstoles que huyeron torpemente en el momento en que Nuestro Salvador fue crucificado.



19. La forma de los nueve peldaños colocados en el coro, así como el trono,

representan el Trono de Cristo y los nueve órdenes de ángeles.



20. Elevados son los misterios de este Templo en lo que concierne a los cielos y la tierra;

en él se representa "típicamente" la Sublime Trinidad, así como el Plan de Nuestro Salvador.



21. Los Apóstoles, que son sus cimientos en el Espíritu Santo y los profetas y mártires, se representan típicamente en él.

Que su memoria pueda estar en lo alto, en los cielos, por la plegaria de la bendita Madre.



22. Que la sublime Trinidad, que ha dado la fuerza a los que lo han construido,

pueda guardarnos de todo mal y librarnos del dolor.

* * *

Como se puede apreciar, el texto es riquísimo, y permite dos lecturas fundamentales: una estructural y otra simbólica, siendo esta última la que más nos interesa.

Entre los párrafos 5 y 19 el anónimo autor del Himno nos proporciona una descripción "externa", arquitectónica, del templo catedral de Edessa. Tal descripción no es detallada, sin duda porque la forma no es aquí lo fundamental, sino el contenido[5]. Se trata de un edificio cupulado, cuya cúpula no está sostenida por columnas, sino sobre cuatro arcos y una base cúbica; el paso desde esta última forma al círculo, estaría dado por la utilización de pechinas, que sirven para sostener la cúpula central, autosoportante, y que carece de cimbra o cualquier tipo de maderamen. El gran problema que se plantea al intentar reconstruir la forma de la catedral, destruida completamente en el año 1071[6], es que, según el Himno, tiene tres fachadas iguales y cinco puertas que se abren al interior. ¿Cómo conciliar esto? Tres son las posibilidades:

1. Cubo cupulado: esta es, aproximadamente, la proposición de A. Grabar[7]. Tendríamos que pensar, necesariamente, en un ábside abovedado, con toda probabilidad una trichora, para eliminar la cuarta fachada, de manera que queden sólo tres. El problema principal estriba en distribuir en estas tres fachadas iguales, las cinco puertas. La única solución es ubicar en la fachada oeste, la principal si es que la iglesia está orientada, tres puertas, y en las fachadas laterales una puerta entre dos arcos ciegos. El edificio resultante está dentro de las posibilidades históricas ya que, precisamente, uno de los tipos característicos de la arquitectura religiosa bizantina es el edificio de planta central cupulado[8]. El santuario, cuyo lugar natural sería el centro, se desplaza hacia el ábside, de modo que la unidad centrípeta se rompe en un eje longitudinal. Es éste el origen de la combinación armónica de la planta central cupulada y la planta basilical alargada, característico de la arquitectura bizantina[9]. (véase Fig. 1) [10].

2. Cruz Cupulada: Schneider ha sugerido esta forma[11], así como el Prof. Héctor Herrera Cajas (QEPD)[12]. Este esquema, en el cual se resume plenamente la combinación del sistema central y del basilical, consiste fundamentalmente en una proyección del modelo anterior, de tal manera que quedan definidas claramente las tres fachadas. En cuanto a la disposición y distribución de las cinco puertas, se puede conservar la proposición precedente. (véase Fig. 2).

3. Cubo cupulado con deambulatorio y atrio: Esta tercera posibilidad, propuesta por el Prof. Romolo Trebbi, parte de un núcleo que es un cubo cupulado con trichora, como en nuestro primer modelo, agregándosele un deambulatorio y, en la parte anterior, un atrio. Para pasar del atrio al deambulatorio habrían dos puertas; las otras tres se distribuyen en cada una de las fachadas del cubo. Se trataría de un modelo históricamente posible; no obstante, según P. A. Michelis, en las iglesias bizantinas el atrio fue suprimido con el fin de exaltar el espacio interior[13]. Sin embargo, la iglesia de San Juan, en Efeso, habría contado con un amplio atrio, como sería también el caso de la iglesia de los Santos Apóstoles en Constantinopla. Por otro lado, el deambulatorio es típico de los martyria, al menos en una primera etapa[14], lo que no es el caso de la catedral de Edessa. La iglesia de los santos Sergio y Baco, en Constantinopla, proporciona un buen ejemplo de organización espacial central cupulada con deambulatorio[15]. (véase Fig. 3).







Cualquiera haya sido la forma real del edificio, ya sea alguna de las tres variantes aquí propuestas, o una combinación de elementos de todas ellas, es indudable que el elemento arquitectónico sobresaliente y constante, es la cúpula[16]. Ésta, como se desprende de la fuente, se caracteriza por carecer de columnas que la soporten, puesto que descansa sobre los cuatro arcos del cubo basal, al mismo tiempo que carece de un "esqueleto" de madera. Su interior cóncavo, adornado con mosaicos, pero probablemente no con temática figurada[17], podría ser semejante al de Santa Sofía de Constantinopla[18], tanto en su forma y estructura, como en su decoración.

Así, pues, el esquema presentado hasta aquí nos permite concluir, en general, que estamos frente a una construcción en la cual se combinan la planta basilical alargada, de eje longitudinal, con la planta central cupulada, de eje vertical. Según esto, y aceptando cualquier agregado a este núcleo central, podemos decir que estamos frente a una construcción representativa de las nuevas fórmulas arquitectónicas que se pusieron en práctica durante el reinado de Justiniano (527-565)[19], cuyos máximos exponentes son los templos de San Sergio y San Baco (527), Santa Irene (c.530), Santa Sofía (532-562), los Santos Apóstoles (536-546), todos ellos en Constantinopla, y San Juan de Efeso (544-564)[20].

* * *

Es necesario detenerse un momento en algunas consideraciones sobre la arquitectura bizantina, especialmente en lo que se refiere al tipo cupulado, antes de ingresar en el problema simbólico. Ya hemos tenido la oportunidad, a través de una primera lectura de la fuente, de aproximarnos a las características de la arquitectura bizantina; no obstante, falta aún completar el cuadro con algunos elementos.

La arquitectura bizantina tiene su origen en el reinado del emperador Justiniano el Grande: "motivos tradicionales e innovaciones formales, necesidades litúrgicas y posibilidades técnicas, afirmación de soluciones logradas y audacia de genios visionarios, todo concurre para la creación de las grandes obras del arte cristiano, en aquel período que André Grabar ha llamado, con tanta propiedad, la Edad de Oro de Justiniano[21]". En el año 532, a causa de la violenta insurrección de Nika, todo el esplendor clásico de Constantinopla, que databa de la época de Constantino el Grande, quedó en ruinas; en ese año, entonces, deja de existir la ciudad clásica y, gracias a los esfuerzos desplegados por Justiniano, nace la ciudad bizantina[22]. Excedería a nuestros propósitos entrar en un análisis detallado de la arquitectura de este momento; nos interesa, por ahora, revisar sumariamente dos aspectos: los antecedentes históricos de la arquitectura cupulada y, en breves notas, la difusión de este tipo arquitectónico, a partir del siglo VI.

Como ya se ha señalado, una de las novedades de la arquitectura religiosa bizantina del siglo VI es la combinación de las plantas basilical y central, cuyo máximo exponente es Santa Sofía de Constantinopla. El elemento principal y dominante es la cúpula; ésta no es una invención bizantina, sino que tiene a su haber un largo pasado, tanto en el Mediterráneo oriental como en el occidental. Si bien es posible hallar construcciones cupuladas en oriente varios milenios antes de Cristo -es el caso de los conos-cúpulas de Mesopotamia o las cúpulas ovulares de Khirokitia en Chipre[23]-, así como también en el arte helenístico[24], es en Roma donde estas formas alcanzarán su mayor expresión.

En efecto, los estudiosos coinciden en que los antecedentes directos de la arquitectura bizantina deben buscarse en Roma[25], "que había traído a la urbe los conceptos desde Oriente, pero los transformó y desarrolló a la manera occidental, logrando un lenguaje propio que, en seguida, devolverá maduro y efectivo a Oriente, iniciando la arquitectura bizantina"[26]. Según Sas-Zaloziecky, los principales elementos técnicos para abovedar ya existían en Roma, y la iglesia de Santa Sofía, por ejemplo, no presentará ningún aspecto arquitectónico que no se halle en algún edificio romano[27]. Sin duda que la construcción más característica y monumental por sus dimensiones, es el Panteón de Agripa, primera construcción con cúpula autosoportante que descansa sobre un tambor cilíndrico[28]. Este templo se identifica con una línea arquitectónica que prefiere "las bóvedas de cañón, aun como naves circulares, y grandes cúpulas", que, "habiendo heredado muchos elementos de Oriente, pasó con sus nuevos enriquecimientos y desarrollos romanos occidentales al Cercano Oriente, quedando como modelo para los edificios paleocristianos y bizantinos"[29].

Los arquitectos orientales, de escuela occidental[30], heredarán los principios de la arquitectura romana, dándole un matiz enteramente propio, de acuerdo con sus propias necesidades litúrgicas o estéticas. Los edificios cupulados bizantinos se pueden dividir en tres tipos: 1. Cúpula sobre plan circular, forma emparentada al Panteón de Agripa; 2. Cúpula sobre plan octogonal, como San Vitale en Ravenna, que es un desarrollo del tercer tipo: 3. Cúpula sobre plan cuadrado, solución que se puede rastrear ya en el siglo VI, y que permanece hasta nuestros días[31]. A este último género pertenecería la catedral de Edessa que describe el Himno. Para pasar desde la forma cuadrada a la circular, se utilizan cuatro triángulos semiesféricos que se sitúan en cada ángulo del cubo: son las pechinas. Esta solución ya era conocida en el Imperio Romano[32]. Bizancio, pues, no copia servilmente, sino que asume creativamente una herencia, siendo capaz, a su vez, de transmitirla con su sello particular.

La difusión de la solución que combina las plantas central cupulada y basilical, en el tiempo y el espacio, demuestra el enorme éxito de estas nuevas formas arquitectónicas. En torno al mar Egeo, Grecia, Asia Menor, Tracia y Armenia, se focalizará el primer gran núcleo de difusión[33].

Durante la dinastía de los Comneno (1057-1204) se introducirán innovaciones que enriquecerán el estilo bizantino; entre éstas podemos destacar la reducción del diámetro de las cúpulas, que ganan en altura y afinan su silueta[34], a la vez que se multiplican las cúpulas en cada edificio[35]. Mistrá, en el Peloponeso, entre los siglos XIII y XV, presenta un particular desarrollo de las formas arquitectónicas bizantinas, combinando la planta basilical con la central, la cúpula y la trichora[36]. Rusia constituirá otro espacio que se verá influido por Bizancio, desde su conversión al cristianismo en 988. "El arte bizantino ganó así una provincia más, cuyos límites habían de extenderse en forma insospechada"[37]. La primera iglesia rusa, Santa Sofía de Kiev, levantada por arquitectos bizantinos, es, fundamentalmente, un crucero con cúpula central y múltiples naves, cada una rematada en un ábside[38].

En todas las construcciones derivadas de la arquitectura bizantina, detrás de las innovaciones -alargamiento de las cúpulas, multiplicación de éstas y de las naves, entre otras- es posible descubrir su origen en la combinación de las plantas basilical y central. Como vimos, pues, la cúpula es siempre el elemento característico: es tiempo ya, entonces, de volver sobre el Himno para ingresar al problema simbólico.

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Conocemos ya la posible forma de la iglesia catedral de Edessa; sin embargo, ella, por sí sola, no nos revela el espíritu que encierra. No basta con conocer el continente, es preciso descubrir el contenido. La iglesia bizantina, como apunta Michelis, está construida en función del interior[39]. Según este autor, la clave para comprender la arquitectura bizantina está en lo que él llama una "estética de lo sublime", en oposición a la "estética de lo bello", predominante en el Mundo Clásico[40]; la primera está dirigida a conmover el alma, la segunda los sentidos; una es interior, y la otra exterior. Ambas están presentes en la arquitectura bizantina, pero la primera es la que predomina: existe una expresión exterior, material, de lo sublime, donde predomina la dimensión y con ella la evidencia de la fuerza, y otra expresión, más interior, más espiritual, donde dominan la profundidad y la cualidad de la fuerza[41]. El Dios de los cristianos no sólo es fuerza, sino también amor infinito, y la muerte de Cristo, sacrificio sublime, exige una representación sublime[42]. El contraste entre un exterior simple y austero, que no produce emoción estética alguna, y el interior sorprendentemente rico en ornamentación, da cuenta de esta concepción arquitectónica[43]. No se trata, como en el mundo clásico, de hacer la casa del dios sobre el modelo de la casa del hombre, es decir, un mégaron en mármol; debe ser, al contrario, un universo en miniatura, ya que allí habita el Dios único[44], "la iglesia es el cielo terrestre en el cual Dios del cielo superior habita y se pasea", según el patriarca Germán[45]. Es por ello que el autor del Himno de Edessa habla de Templo, para significar que se está frente a un lugar santo; independientemente de la presencia o ausencia de los fieles, la Presencia, Dios, habita allí[46]. La Domus Dei debe ser, pues, una imagen del Cosmos, verdadera morada de Dios, omnipresente y omnipotente.

Según René Guénon, todo edificio construido siguiendo criterios tradicionales, posee una significación cósmica, lo cual es válido, en primer lugar, para aquellos edificios destinados al culto[47]. El primer indicio que nos proporciona el Himno está en la relación que se establece con el Tabernáculo de Moisés, el cual, según Cosmas Indicopleustes, es una imago mundi[48]. En efecto, la descripción del Tabernáculo en el libro del Éxodo (XXV-XXVII), fue el centro de la especulación cosmológica para judíos y cristianos de los primeros siglos[49].

Es evidente que para el autor del Himno no basta con una apreciación estética del edificio; hay que mirar atentamente, dice, y se estará al fin lleno de admiración. No se trata, así, de un goce estético frente a la obra, sino de un goce místico, es un arte dirigido al espíritu, al alma del espectador que, iluminada, extasiada y ligera, se eleva a las alturas[50]. Esta noción será muy cara a los bizantinos, y ya la había formulado el Pseudo Dionisio Areopagita, al decir que la imagen sensible es una vía para elevarse a la contemplación de lo Insensible[51]. La belleza no es un fin, como en el arte clásico, sino un medio; tras la belleza externa de las imágenes se ocultan imágenes y símbolos que el observador debe saber descifrar, para ingresar de lleno a un Universo Superior. El arte se constituye, en dos palabras, en vía anagógica.

Cuando Procopio, refiriéndose a Santa Sofía de Constantinopla, dice que "la iglesia se ha convertido en un espectáculo de gran belleza, magnífico para los que pueden gozar de ella, e increíble para los que de ella oyen hablar"[52], se refiere a un goce interior, porque las formas no constituyen un fin en sí mismas, sino que proclaman la Presencia de Dios. "Siempre que se acude a esta iglesia para rezar -dice el mismo autor- se comprende inmediatamente que este trabajo se ha realizado no por el poder o la habilidad humanas, sino por la influencia de Dios. Y así, la mente del visitante se eleva hacia Dios y flota en las alturas, pensando que Él no puede estar lejos, sino que debe amar el habitar en este lugar que Él mismo ha escogido"[53].

Las nuevas concepciones artísticas que rigen y modulan la construcción del edificio, responden a un fin sublime que es elevar, a través de lo sensible y lo bello, el alma hacia lo Insensible y lo Bello, hacia Dios. La belleza material que excita los sentidos es sólo el medio para alcanzar dicho fin. Choricius, en el siglo VI, sostiene la misma idea: "[cuando te encuentres] ante el vestíbulo de una iglesia, te resultará difícil decidir si te quedarás contemplando el pórtico o bien accederás a las delicias que, juzgando por la belleza del exterior, te aguardan dentro"[54]. La grandiosidad y belleza de las formas exteriores no deben distraer al fiel de su contemplación, sino sugerir, invitar a explorar el interior. Es, así, un arte utilitario. San Agustín nos proporciona una clave para entender esto: "Gozar es adherirse a una cosa por el amor de ella misma. Usar es emplear lo que está en uso para conseguir lo que se ama, si es que debe ser amado... hemos de usar este mundo, pero no gozarnos de él, a fin de que por medio de las cosas creadas contemplemos las invisibles de Dios, es decir, para que por medio de las cosas temporales consigamos las espirituales"[55]. Es ésa concepción la que se encuentra presente en todo el Himno, y no se le puede comprender sin tenerla en cuenta.

En el párrafo cuarto del Himno, se nos dice que el templo es un microcosmos, ya que si el Universo se asemeja a un edificio perfectamente construido, ciertos edificios, en este caso un templo, deben ser semejantes al cosmos[56]; entre los párrafos cuarto y octavo se resume dicha concepción. El análisis simbólico de este edificio, cubo cupulado, nos permite distinguir dos niveles: el inferior, que corresponde al mundo terrenal, y el superior, al mundo celestial; es la unión armónica de ambos lo que nos permite hablar de un verdadero microcosmos.

En el párrafo cuarto el autor nos dice que el templo representa una imagen de la tierra y, tal como a esta, las aguas lo rodean. Recordemos que en la cosmografía antigua la tierra se representaba rodeada por el "mar océano"[57]. Es difícil imaginar cómo rodeaban las aguas al edificio: ¿estaba cerca de una laguna o un río, quizá en un meandro? Lo cierto es que el primer edificio, datado en el siglo IV, fue destruido por una inundación. Es todo lo que sabemos. Por otro lado, se nos indica que sus cuatro anchos arcos representan "los cuatro extremos de la tierra"; el número cuatro es un número sagrado, y su asociación con los confines de la tierra, y la tierra toda, es típico del lenguaje simbólico[58]. Dicho número nos sugiere una forma geométrica, el cuadrado, "símbolo de la tierra, por oposición al cielo"[59]. El cubo, que soporta la cúpula, representa, así, el mundo material[60].

En los párrafos cinco al seis el autor del Himno describe el "techo" y la "elevada cúpula". No se ha podido determinar si el primer término designa también a la cúpula, puesto que se habla de un techo "abovedado y simple"[61]. Si no son sinónimos ambos conceptos, significa -huelga decirlo- que hay un "techo abovedado" y "una cúpula", lo que confirmaría la tesis del edificio cruciforme. El "techo", dice la fuente, representa al cielo, y la cúpula, al "alto cielo", o sea, el cielo de los cielos. Choricius, al hablar del techo de la iglesia de San Sergio, dice que éste "imita el cielo visible"[62]; así, existiría un "cielo visible" y un "alto cielo", tal como lo expresa, por ejemplo, Cosmas Indicopleustes, que entre la Tierra -mundo presente- y el Cielo -mundo futuro- existe un velo que los separa, que es el cielo visible, el firmamento[63].

La imagen representada corresponde a una concepción cosmológica conocida en la época. Ahora bien, si estamos frente a un edificio de planta central cupulada, cuya cúpula, como el cielo, no está sostenida por columnas ni soporte alguno, sino que "pareciendo un yelmo"[64], está firmemente ubicada sobre su parte más baja, es decir, la cúpula descansa directamente sobre la base cúbica, gracias a cuatro grandes arcos y recurriendo a las pechinas[65]. Esta estructura permite que la cúpula parezca estar suspendida en el aire, desprovista de toda gravidez[66], representando magníficamente al cielo. Esta impresión se torna más fuerte aún cuando el interior de la cúpula se ornamenta con mosaicos de oro, ya que esto lleva, por un lado, a lo infinitesimal y, por otro, gracias al color, a sugerir la idea de un cielo estrellado[67].

La cúpula, pues, representa la bóveda celeste, y el conjunto del edificio es la imagen del universo todo[68]. Lo cuaternario, símbolo de lo terrestre, y lo ternario, lo celestial, se conjugan armónicamente[69]; el número cinco aparece como el centro, compartido por el círculo y el cuadrado, y es, simbólicamente, el ómphalos que permite transitar desde el mundo terrestre al celestial[70]. El eje vertical del templo es un axis mundi, un Pilar Cósmico, una verdadera Escala de Jacob, esto es, un Centro[71]. La cúpula es el Espíritu universal envolviendo al mundo[72].

La disposición de la ornamentación interior, que sigue una jerarquía ascendente, contribuye a acentuar la imagen cósmica. La iconografía distingue tres zonas para la distribución de las distintas imágenes: una parte representa al Cielo, otra es reservada para los Misterios de la vida de Cristo, y la última, la inferior, para el conjunto de los santos, mártires y confesores. "Las concepciones teológicas se encuentran en perfecto acuerdo con el sentimiento estético para establecer las jerarquías de lugares y personajes"[73]. Los serafines se ubican a cierta altura en las pechinas de tal manera que la cúpula parezca aun más ligera, sostenida por sus alas -más tarde, en dicho lugar, se colocarán también representaciones de los cuatro evangelistas, o de cuatro Misterios centrales del cristianismo: Anunciación, Nacimiento, Bautismo y Transfiguración, como es el caso de Dafní, cerca de Atenas-. El punto más elevado, la cúpula, es el lugar reservado al Pantocrátor, o algún símbolo que lo represente, como la Cruz[74]. Respecto del ábside, allí se ubicará un ícono de la Virgen María -si el templo carece de cúpula, el lugar será ocupado por el Pantocrátor-; los ábsides laterales -cuando se trata de una trichora, contendrán escenas evangélicas[75]. Finalmente, en los planos inferiores, se representarán los mártires y santos[76], quienes abren la vía que conduce al Padre mediante sus ejemplos de vida. Estas ornamentaciones entran en composición con el resto del edificio para representar todo lo celestial en el conjunto cósmico[77].

Todas estas formas, imágenes, paredes revestidas de mármoles y mosaicos, requieren de un elemento que les otorgue una real dimensión: la luz. En los párrafos nueve, trece y catorce, el Himno alude a la importancia de la luz. Según parece, ésta entraba al edificio por dos lugares, tres ventanas situadas en el ábside -simbolizan la Trinidad: entran tres haces de luz, pero la luz es sólo una- y que iluminan directamente el santuario, y varias ventanas situadas en las tres fachadas; la cúpula no parece tener ventanas.

La luz juega un rol fundamental, como apunta André Grabar a propósito de Santa Sofía de Constantinopla: "Cada hora tiene su propio haz de flechas luminosas, las cuales, al penetrar por diferentes ventanas, convergen en un determinado punto, o, al entrecruzarse a diferentes alturas, resbalan a lo largo de las paredes y se tienden sobre las losas del pavimento. Este encaje radiante se halla en movimiento y su movilidad aumenta el efecto irreal de la visión"[78].

El fiel que entra a la iglesia se sentirá sobrecogido por la iluminación y, al levantar la vista y dirigirla a la parte más alta, se encontrará con un cielo estrellado y, al final, el Pantocrátor, quedando inmóvil, perdido en el seno de esta inmensidad, sumergido por el infinito en el corazón de este espacio ilimitado, deslumbrado por la luz, material y mística, que irradia la cúpula[79]. El arte, aquí, tiene como misión hacer aparecer la idea en la materia, y esa idea es la Luz, así, con mayúscula; esta mística de la Luz se sustenta en que la materialidad humana impide el acercamiento a la luminosa inmaterialidad de Dios, y por ello todos los recursos técnicos y estilísticos se combinan en una forma que tiene como fin elevar el alma del espectador hacia Dios, extasiándolo con el juego de figuras y haces luminosos; es, como diría Michelis, un arte sublime. Así, podemos concluir, junto al anónimo autor del Himno de Edessa, que en este templo "están exaltados todos los misterios en cuanto al cielo y a la tierra".

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El universo simbólico que pudimos descubrir en el Himno alcanzó una gran difusión, que corrió a parejas con la de las formas arquitectónicas. Ideas semejantes, como aquella del arte como vía anagógica, encontraremos en los escritos de Juan Damasceno (De imaginibus orationes, s. VIII), Focio (Homilía X, s. IX), León VI (Sermones, ss. IX-X), Nicéforo Grégoras (Historia, s. XIV), Nicolás Mesarites (Descripción de la iglesia de los Santos Apóstoles de Constantinopla, s. X), entre otros[80]. Es posible percatarse de que el Himno de Edessa da cuenta de toda una concepción que, hundiendo sus raíces en el siglo VI, se proyecta a través de toda la historia bizantina; es el triunfo de la "estética de lo sublime".

La fuerza original de la que estaban dotadas estas concepciones estéticas y simbólicas será tan fuerte y viva, que traspasará no sólo los límites geográficos, sino también las fronteras religiosas. El arte islámico recibirá también su influencia, la que se puede descubrir, por ejemplo, en la Mezquita de la Roca de Jerusalén, que sigue la línea de los martyria cristianos: un cuerpo octogonal cubierto con cúpula[81]. Según Oleg Grabar, el arte islámico se nutrió en gran medida del arte bizantino; artistas imperiales fueron incluso llamados por los musulmanes para decorar sus edificios[82]. Los hombres del Islam se impresionaron con los monumentos cristianos, copiando algunas de sus formas[83].

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José Marín R.

Magister en Historia. Profesor del Centro de Estudios Griegos, Bizantinos y Neohelénicos "Fotios Malleros" de la Universidad de Chile, de la Universidad Católica de Valparaíso, Pontificia Universidad Católica de Chile y Universidad Adolfo Ibáñez.

[1] McVey, K., "The domed church as microcosm: literary roots of an architectural symbol", en: Dumbarton Oaks Papers, 37, 1983, p. 91.

[2] Yarza, J., et alt., Fuentes y Documentos para la Historia del Arte, vol. II: Arte Medieval I. Edad Media y Bizancio, Ed. G. Gili, 1982, Barcelona, p. 37.

[3] McVey, K., op. cit., p. 91.

[4] La presente versión está hecha sobre la inglesa de McVey, K., op. cit., p. 95, quien, además, transcribe el texto original siríaco (pp. 92-94). Existe también una versión en español, publicada en Yarza, J., op. cit., pp. 38-40. También se puede leer el texto en: Herrera, H., Marín, J., El Imperio Bizantino. Introducción Histórica y Selección de Documentos, Ediciones del Centro de Estudios Bizantinos y Neohelénicos "Fotios Malleros" de la Universidad de Chile, 1998, Santiago de Chile, pp. 43 y s. También disponible en Internet: http://www.geocities.com/CollegePark/Square/3602/B15.HTML.

[5] v. Michelis, P.A., Esthétique de l'art byzantin, Flammarion, 1959, Paris, passim, esp. pp. 23-141. Por lo mismo, el análisis estructural, por así llamarlo, que presentaremos aquí, es bastante simple. Sólo nos interesa mostrar la o las posibles formas que pudo tener el edificio. El lector interesado dispone de una amplia bibliografía para enterarse del tipo de material y técnicas empleadas por los arquitectos bizantinos. A modo de sugerencia, remitimos a: Michelis, P.A., op. cit., passim, esp. pp. 57 y ss.; un excelente y minucioso análisis en Leclerq-Cabrol, Dictionnaire d'Archéology Chrétienne et de Liturgie, Létouzey et Ané, 1921, Paris, s. V. Byzance, Dôme, etc. Importantes datos, incluyendo un mapa de la difusión del arte bizantino en el Mediterráneo y más de una veintena de planos, en Enciclopedia of World Art, McGraw-Hill Co., 1960, London, vol. II, col. 752 y ss., s.v. byzantine art; no se puede dejar de nombrar la importante obra de Grabar, A., La Edad de Oro de Justiniano. Desde la muerte de Teodosio hasta el Islam, trad. de A. del Hoyo, Ed. Aguilar, 1966, Madrid, toda la Primera Parte, esp. pp. 71 y ss., al final de la obra se incluye un excelente apéndice de planos, pp. 346 y ss.; la obra de Chueca, F., Historia de la Arquitectura Occidental, Dossat, 1979, Madrid, pp. 219 y ss., así como la de Sas-Zaloziecky, W., El arte bizantino, Trad de Revilla, Moretón, 1967, Bilbao, passim, esp. pp. 18 y ss., aunque más generales, aportan también datos de interés. Fundamental es el libro de Mango, C., Arquitectura Bizantina, Aguilar, 1975, Madrid.

[6] McVey, K., op. cit., p. 106.

[7] Cit. en Ibid., p. 107.

[8] Michelis, P.A., op. cit., pp. 65 y s. La trichora, ábside triple y abovedado, parece ser, en su expresión más acabada, un poco más tardía; no obstante, es posible verla, ya sea insinuada o totalmente explícita, en alguna construcción de la época, como v.gr. en Santa Sofía de Constantinopla (v. Plano en Chueca, F., op. cit., p.228, fig. 119; Enciclopedia of..., op. cit., col. 774; Michelis, P.A., op. cit., p. 119, fig. 43; Grabar, A., op. cit., p. 88, fig. 93), aunque en este caso la disposición sigue la curva de la gran bóveda secundaria, y no una recta como sugerimos nosotros. V. Tb. La iglesia de San Pedro y San Pablo en Gerasa (planta en Grabar, A., op. cit., p. 357, pl. 435; Trebbi, R., "El manierismo de Mistrá", en: Byzantion Nea Hellás, 7-8, 1985, p. 300.

[9] Michelis, P.A., op. cit., p. 69. V. Tb. Sas-Zaloziecky, W., op. cit., pp. 22 y 32; Chueca, F., op. cit., pp. 220 y 230; para un período posterior, Trebbi, R., op. cit., p. 300.

[10] Con trazo continuo se señalan los datos que proporciona la fuente, y con trazo discontinuo aquellos que suponemos, esto es, la reconstrucción.

[11] Cit. en McVey, K., op. cit., p. 106.

[12] Ref. oral del Prof. Trebbi. V. Trebbi, R., op. cit., p. 300.

[13] Michelis, P.A., op. cit., p. 59. Sin embargo, es posible encontrar iglesias bizantinas con atrio, v. Grabar, A., op. cit., p. 96.

[14] Michelis, P.A., op. cit., p. 69.

[15] V. planta de este templo en Chueca, F., op. cit., p. 222, fig. 115; Michelis, P.A., p. 69, fig. 14; Enciclopedia of..., op. cit., col 771.

[16] Es evidente que algunos datos estructurales han quedado sin analizar, pero, insistimos, no nos interesa presentar un tratado arquitectónico.

[17] V. Yarza, op. cit., p. 37.

[18] Buenas fotografías se pueden ver en Grabar, A., op. cit., p. 4, fig. 1 y pp. 90-97, figs. 96 a 103; Michelis, P.A., op. cit., p. 124, fig. 48. Hay que precisar, sí, que sólo se trata de un parecido, ya que la catedral de Edessa no parece contar con ventanas en la cúpula.

[19] Chueca, F., op. cit., p. 218.

[20] Ibid., p. 229. Para la planta de San Sergio y San Baco, v. nota 15, supra. Planta de Santa Irene, en Michelis, P.A., op. cit., p. 70. Fig. 15; Enciclopedia of..., op. cit., col. 774; Grabar, A., op. cit., p. 366, pl. 468. Para la planta de Santa Sofía, v. nota 8, supra. Planos de San Juan de Efeso, versión muy aproximada a la de los Santos Apóstoles, según F. Chueca, en Grabar, A., op. cit., p. 364, pl. 462, v. tb. P. 81, figs. 85-86; Enciclopedia of..., op. cit., col. 772. Se trata en este último caso de un edificio cruciforme de planta basilical alargada, jalonado con una serie de cuatro espacios cupulares; en la parte anterior posee un amplio atrio.

[21] Herrera, H., "Los orígenes del arte bizantino. Ensayo sobre la formación del arte cristiano", en: Byzantion Nea Hellás, 7-8, 1985, p. 154.

[22] Chueca, F., op. cit., p. 218. Según Sas-Zaloziecky, op. cit., p. 14, hasta mediados del siglo VII sólo se puede hablar de arte "protobizantino" o "romano oriental".

[23] Trebbi, R., "Espacio y tecnología como novedad y aporte de la arquitectura romana del Imperio", en: Semanas de Estudios Romanos, 2, 1984, p. 126.

[24] Id.

[25] v.gr. Chueca, F., op. cit., pp. 222 y s.; Enciclopedia of..., op. cit., col. 770.

[26] Trebbi, R., "Espacio y...", op. cit., p. 126.

[27] Sas-Zaloziecky, op. cit., pp. 27 y s.

[28] Trebbi, R., "Espacio y ...", op. cit., p. 128. Planta en Ibid., p. 131, fig. 8; Michelis, P.A., op. cit., p. 116, fig. 40; Coarelli, F., Roma, Trad. de J. Blanco, Mas-Ivars Ed., 1971, Valencia, p. 128.

[29] Trebbi, R., "Espacio y...", p. 134.

[30] Sas-Zaloziecky, op. cit., p. 26.

[31] Leclerq-Cabrol, op. cit., t. IV-1, col. 1368 y s.

[32] Sas-Zaloziecky, op. cit., p. 27.

[33] V. mapa en Enciclopedia of..., op. cit., col. 755-756.

[34] Chueca, F., op. cit., p. 238.

[35] Id.

[36] v. Trebbi, "Espacio y...", op. cit., passim, esp. pp. 303 y s. Tb. Chueca, F., op. cit., pp. 239 y s.

[37] Ibid., p. 240.

[38] Planta en Ibid., p. 241.

[39] Michelis, P.A., op. cit., p. 59.

[40] Ibid., pp. 12 y ss.

[41] Ibid., p. 37.

[42] Ibid., p. 47.

[43] Ibid., p. 59. V. Herrera, H., op. cit., pp. 111-116, en relación a la tumba de Gala Placidia, donde se exponen magistralmente estos postulados.

[44] Michelis, P.A., op. cit., p. 63.

[45] Migne, PG, 98, 384, cit. en Michelis, P.A., op. cit., p. 52.

[46] McVey, K., op. cit., p. 96.

[47] Guénon, R., Símbolos fundamentales de la Ciencia Sagrada, trad. de J. Valmard, Eudeba, 1988 (1962), Bs. Aires, p. 221.

[48] V. Cosmas Indicopleustes, Topographie Chrétienne, II, 19-35-36-48, Trad. de W. Wolska Conus, Ed. Du Cerf, Sources Chrétiennes, 141, 1968, vol. 1, pp. 322-340 y ss, 356.

[49] McVey, K., op. cit., p. 97.

[50] Michelis, P.A., op. cit., p. 124.

[51] Pseudo Dionisio Areopagita, La jerarquía celeste (c. 500), en Yarza, J., op. cit., p. 33.

[52] Procopio, De Aedificiis (s. VI), en Yarza, J., op. cit., p. 98.

[53] Id., p. 102.

[54] Choricius, Laudatio Marciani, en Yarza, J., op. cit., p. 130.

[55] San Agustín, De Doctrina Christiana, I, 4,4, en Obras de San Agustín, vol. XIV de la BAC, Trad. de B. Martín, 1957, Madrid, pp. 65 y s. v. tb. Herrera, H., op. cit., p. 95.

[56] McVey, K., op. cit., p. 98.

[57] Id.

[58] Ibid., p. 100.

[59] Chevalier-Gheerbrant, Diccionario de los símbolos, Trad. de M. Sivar y A. Rodríguez, Herder, 1986 (Paris, 1969), Barcelona, p. 370.

[60] Ibid., p. 384.

[61] McVey, K., op. cit., p. 99.

[62] Choricius, op. cit, véase nota 54, supra.

[63] Cosmas Indicopleustes, op. cit., II, 35, p. 340.

[64] La misma imagen es utilizada por Pablo Silenciario en su Descripción de Santa Sofía, en Yarza, J., op. cit., p. 107: "Elevándose sobre el espacio inconmensurable está el yelmo, redondeado en todos lados como una esfera, y que, radiante como los cielos, cubre el techo de la iglesia".

[65] Cf. Agathias, Historia Eclesiástica: "Sobre estos arcos nuevos levantaron el círculo, semiesfera o como se quiera llamar, que domina el centro del edificio", en Yarza, J., op. cit., p. 61. V. tb. Procopio, De Aed., nota 52, supra.

[66] Id. Tb. Pablo Silenciario, nota 64, supra.

[67] Un ejemplo magnífico lo proporciona el mausoleo de Gala Placidia, v. Herrera, H., op. cit., pp. 111-115. Chevalier-Gheerbrant, op. cit., p. 197.

[68] V. Ibid., pp. 196 y s.; Guénon, R., op. cit., pp. 221 y s.; Michelis, P.A., op. cit., pp. 52 y 63.

[69] V. Guénon, R., op. cit., p. 222.

[70] V. De Champaux, Introduction au monde des symboles, Zodiaque, 1966, l'Abbaye Sainte Marie de la Pierre-qui-vire, pp. 31 y s.; Eliade, M., Lo sagrado y lo profano, trad. de L. Gil, Guadarrama, 1981 (1957), Barcelona, p. 29; Guénon, R., op. cit., p. 74; Hani, J., Le symbolisme du Temple Chétien, La Colombe, 1962, Paris, p. 30.

[71] Sobre el centro, v. Chevalier-Gheerbrant, op. cit., p. 272; De Champaux, op. cit., pp. 23 y ss.; Hani, J., op. cit., p. 35; Eliade, op. cit., pp. 36 y ss.

[72] Chevalier-Gheerbrant, op. cit., p. 196.

[73] Michelis, P.A., op. cit., p. 144.

[74] Ibid., p. 145.

[75] V. Enciclopedia of..., op. cit., vol. II, col. 842.

[76] V. Pseudo Dionisio Areopagita, nota 51, supra.

[77] Chevalier-Gheerbrant, op. cit., p. 197.

[78] Grabar, A., op. cit., p. 86.

[79] Michelis, P:A., op. cit., p. 123.

[80] Todas las fuentes en Yarza, J., op. cit., pp. 222-223, 236-238, 255-256 y 331-332, respectivamente.

[81] V. planta en Grabar, O., La formación del arte islámico, trad. de P. Salsó, Cátedra, 2ª Ed., 1981 (1973), Madrid, p. 64, fig. 34.

[82] Ibid., pp. 66, 72, 78, 95, 143.

[83] Ibid. P. 95.

Mónica Miralles.-


En época de la undécima persecución cristiana por parte del emperador Diocleciano en el año 305 D. C. Constantino y su amigo (y casi hermano) Aureliano parte al lado de su padre el César de Occidente Constancio Cloro hacia las tierras de Hispania, Galia y Britania. Pronto deben enfrentarse con la tribu de los pictus en Britania quienes invadían el territorio romano, separados únicamente por el Muro de Adriano. Antes de esta batalla muere Constancio Cloro, recién nombrado Augusto de Occidente y el ejército nombra a su hijo Constantino su sucesor. Sin embargo debían respetarse los acuerdos impuestos por Diocleciano en su tetrarquìa.

Constantino es nombrado césar, es decir próximo sucesor al trono imperial de occidente y manda a buscar a su esposa, su hijo Crispo y su madre Helena. Es cuando se entera de la muerte de su esposa. Años después se casa con la hija del co-emperador de Diocleciano, Maximiano. El amor entre Constantino y Fausta surge inmediatamente.

Mientras en el resto del territorio romano las luchas internas por el poder no se dejan esperar. Según la tetrarquìa, Galerio y Liciano eran los Augustos y Maximino Daya y Constantino los Césares, pero Majencio (hijo de Maximiano y hermano de Fausta) se alza con el poder en Roma y exige se le nombre como Augusto. Pronto la lucha por el poder romano es sin cuartel. Entre Galerio, Liciano y Constantino firman el Edicto de Tolerancia, primer edicto que les permite a los cristianos libertad de culto. Meses después Galerio muere de dolorosa enfermedad, sus territorios se reparten entre Liciano y Maximino Daya y entre estos dos reanudan su persecución a los cristianos. En este punto todos son Augustos.

Constantino descubre a Maximiano en alta traición, una vez atrapado Maximiano decide suicidarse. Majencio, (hijo de Maximiano y hermano de Fausta) decide aprovechar esta coyuntura y enfrenta a Constantino. Constantino recorre las poblaciones acercándose a Roma, la noche previa a la batalla del Puente Milvio tiene un sueño donde escucha una voz que le indica que sólo con el signo de la cruz (la cruz de los cristianos) puede vencer a Majencio y ganar Roma. Constantino decide aceptar la cruz como su estandarte y efectivamente vence a su enemigo en la famosa batalla. En este momento Constantino es el único Augusto en Occidente y decide aceptar la nueva fe (la de su madre Helena quien es una fiel creyente). Y decide también firmar con Liciano (el Augusto oficial de Oriente) el Edicto de Mediolanum, el cual le da verdadera libertad de culto, poder y beneficios a la nueva Iglesia Católica y decide aceptar ser el mensajero del Dios único.

Constantino y su amigo Aureliano se ven inmersos en una vorágine de creencias e historia, de fe y esperanza cristiana. Aureliano a su vez mantiene un romance ocasional con Fausta, la esposa de su mejor amigo. En medio de este mundo de Cristo Aureliano conoce y se enamora de María un hermosa joven cristiana. Mientras Liciano, vence en batalla a Maximino Daya quedando ambos como únicos Augustos, Liciano para Oriente y Constantino para Occidente. Liciano se casa con la hermana de Constantino y sellan un acuerdo de no agresión el cual nunca es respetado.

Mientras Aureliano se casa con María, la joven cristiana y decide convertirse al cristianismo. Su furtivo romance con Fausta termina y meses después recibe de los padres de María un documento secreto escrito en arameo que se ha mantenido en la familia por generaciones y que no debe ser dado a la luz hasta que así les sea indicado, es la Epístola de Jesús a los Esenios. Aureliano parte con su mujer y sus hijos a Hispania como prefecto de Roma ya que considera que para cumplir la misión encomendada de proteger aquel documento debe mantenerse lo más lejos posible de Constantino y la nueva Iglesia Católica.

Con los años Constantino va adquiriendo mayor poder y apoya y es apoyado por la Iglesia Católica a la que el contribuye a engrandecer. Pronto el poder y alcance de uno y otro es uno mismo. Finalmente después de muchas luchas con Liciano ambos Augustos deben enfrentarse en una batalla final, en la que Constantino vence una vez más a Liciano y esta vez los ruegos de su hermana Constancia, esposa de Liciano, no serán escuchados. Finalmente después de varios meses privado de la libertad, Constantino ordena la muerte de su enemigo y cuñado.

Mientras tanto, surge en oriente una lucha interna dentro de la Iglesia Católica por determinar la divinidad o no de Jesucristo, es tanta las diferencias entre las dos facciones que amenazan con derrumbar la paz en territorio romano, debido a ello y para poner punto final a esa discusión Constantino convoca a un Concilio, el más grande jamás efectuado, es el Concilio de Nicea en 325 d.C.

A este concilio asisten obispos de todas las latitudes y en el se establecerán las bases de lo que posteriormente sería la gran Iglesia Católica, tal y como la conocemos hoy en día. Allí se decide la naturaleza de Jesús, se establece el Credo Niceno (tal como lo conocemos hoy), se fija la fecha del viernes santo y muchos otros puntos. Para esta ocasión tan importante, Aureliano viaja a Nicea para hablar con su amigo y hermano. Y lleva con él La Epístola de Jesús a los Esenios. Al ser testigo del manejo a lo interno de la nueva iglesia y de la influencia de Constantino, Aureliano decide hacer un último intento de salvar la fe. Decide pedirle a un amigo, Pacomio, que le traduzca al griego la carta, para poder enseñársela a Constantino y que el lea directamente (sin necesidad de un traductor) el mensaje de Jesús.

Aureliano regresa en presencia de Constantino en la celebración de las Vicennalias en Histri. Para la celebración de sus veinte años en el poder Constantino ha reunido a toda su familia, es aquí donde se reencuentran Fausta y Aureliano y por una noche vuelven a revivir la pasión que sentían. Aureliano le confiesa que ha descubierto que la antigua relación que mantenía con el ahora la mantiene con el primer hijo de Constantino, Crispo. Fausta lo niega, pero Aureliano está casi seguro de ello. La noche siguiente Aureliano le muestra a Constantino la carta en espera de que el emperador cambie su proceder con relación a la iglesia Católica. Al ver que Constantino no dará marcha atrás Aureliano le informa que se ira muy lejos, esta vez para siempre. Es cuando descubren ambos que el amor que sienten el uno por el otro es un amor más allá de hermano ò amigos, es amor de hombres. Al día siguiente Fausta acusa a Crispo de intentar seducirla y exige la pena máxima para tal ofensa: la muerte. Al verse empujado a una situación comprometedora frente a los miembros del senado y de toda la población, Constantino no puede hacer otra cosa que ordenar la muerte de Crispo. Luego Helena, su madre, le demostraría que Fausta inventó aquello y ciego de dolor la sigue hasta Roma donde ordena que Fausta sea sumergida en agua hirviente hasta morir.

Luego de todo aquello, Aureliano parte junto a su familia a Finisterra y se separa para siempre de Constantino. En la despedida su amigo le confiesa que el sabía del romance de Fausta con él y que ya lo había perdonado hacia muchos años.

Tiempo después Constantino ordenaría destruir aquellos documentos (evangelios, epístolas, etc.) que no pertenecieran al canon de la Biblia, Aureliano más que nunca debe proteger su tesoro, aunque sabe que su amigo nunca le hará daño.

Constantino se convirtió en el único emperador romano, su influencia y poder dentro de la Iglesia y fuera de él, le han dado el derecho a ser llamado: Constantino el Grande. Fue bautizado en la religión cristiana en su lecho de muerte y es hoy en día considerado el 13 avo. Apóstol a pesar de que su periodo se le conoce como “La imperatoria del Sol Invictus”, un Dios pagano de su juventud. Sin él la Iglesia Católica no sería lo que es hoy en día. El mensaje de Jesús en su epístola a los Esenios, permanece hoy en día sin conocer.

Tuesday, September 08, 2009

NOTA ACLARATORIA.-


Fr.+ Manuel Hidalgo. O.B+J, como Técnico de FUPRADE, está dando clases de carácter gratuito, en la que la Fundación abona los gastos logísticos, de deportistas Patrocinados, entre los que se encuentra, entre otros, Antonio Leo, perteneciente a la Federación Andaluza de TKD.

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Este trabajo, de gran relevancia, realizado por nuestro Hermano Manuel, no está englobado en ninguna actuación Federativa. Y está encauzada por nuestra Fundación para ayudar a aquellos deportistas becados a mejorar su técnica.